duh...

Soy nuevo en animaciones, está es la primera que hago (de muchas espero) y bueno pues ahora abro este blog, despidiendo mis dos blogs pasados que fueron etapas muy padres de mi vida tanto quiwo, como nicetoknowyou en su momento fueron muy importantes para mi, es mera evolución bloggera :) y estoy muy feliz de que los pude recuperar, como toda persona tengo diferentes humores, diferentes etapas y todo va cambiando constantemente: mentalidad, proyectos, forma de ver las cosas, etc. Unas para bien, otras no tanto... pero cada vez voy regresando más a la normalidad, aunque ahora voy al psicólogo y tengo muchos pedos mentales, pero ¿Quién no los tiene? Me siento muy bien, en mi casa, en mi escuela. Los ataques de ansiedad han desaparecido por completo y espero que sea el comienzo de un nuevo yo. Este blog está totalmente enfocado al mismo propósito de los anteriores: poner lo primero que se me venga a la mente, sea bueno, malo, estúpido, creativo, pasajero, lo que sea que me permita expresarme de una manera más directa al mundo.

Así es, ya era hora de que volviera al mundo del blog y pues hay razones -bastantes y buenas- por las cuales no había querido escribir, más que falta de interés... se podría decir qué me fui un rato. ¿A dónde? No les gustaría saber, no me gustaría recordar y sería algo simplemente fuera de lugar. Ahora mismo me encuentro no del todo 'normal' si así lo quieren ver, no abro este blog ni para qué sea el más leído, ni para complacer los demás. Son simples pensamientos que se me vendrán a la mente. Sí, los publicare. Y sí, los podrás leer, pero dudo que los entiendas. Yo tampoco los entiendo, de hecho ese es el 'me-hoyo' del problema, simplemente ¡No entiendo! Y lo peor es que nunca lo haré, o al menos no pronto; y si yo no me entiendo, quién sea que lea esto tampoco entenderá. Pero tal vez valga la pena explicar, tal vez alguien entienda y cuando eso pase seré: no feliz, pero al menos entendido.

Pasando a otras cosas, para ponernos al corriente: sigo en Guadalajara, actuando y bailando. Practicándolo, estudiándolo, comprendiéndolo, analizándolo. Es lo que siempre había querido hacer y la verdad que como todo ha habido momentos buenos, momentos malos, momentos realmente desesperantes. Pero creo que todo marcha bien, aunque mi mente ha estado muy pesimista estos últimos meses -y creo que se refleja bastante en la redacción-, la verdad es que no me falta casi nada, tengo un cuarto hermoso -aunque en una zona media ruidosa- pero creo que definitivamente es en donde más a gusto me he sentido, desde Toronto que no dormía tan a gusto. He estado en constantes viajes, de todo tipo. Tengo ya casi dos meses libre de toda culpa y me ha costado mucho trabajo entender está realidad, este ritmo de vida, la realidad 'real' es... diferente. Da miedo, a veces. Me ha llegado de varias formas, unas dolorosas, otras preocupantes. Pero como todo creo que hay que enfrentar los miedos, hacer lo que creías imposible, cada paso es tan importante como el anterior y el que viene tiene que ser mejor, para avanzar bien, no avanzar por avanzar. Estoy en un punto de mi vida donde no se qué será de mi, donde no hay amor, no hay esperanza, no hay ninguna razón válida para seguir viviendo y no quiero sonar suicida, ni mucho menos emocional. Pero la gente que realmente vale la pena no hace lo que debería de hacer. Ni yo lo hago. Todo es muy extraño, todo es muy diferente aquí y ahora, más que nada esta etapa. La soledad ya es algo cotidiano, algo a lo que sin darme cuenta estoy acostumbrado y al final uno siempre está solo, a pesar de lo que digan los amigos y la familia, uno tiene que ver por sí mismo, uno tiene que sobrevivir ante la injusticia, ante la impotencia, ante la desigualdad diaria de este país mediocre y de repente bailo, de repente sonrió y por unos segundos siento que soy yo de nuevo, que puedo ignorar toda la mierda que hay en el mundo y la vida en general pero, ¿valen la pena esos minutos, por las otras 10 horas en las que vuelvo a la realidad?

A veces me siento muy cansado, me encantaría recuperar a mi antiguo YO, ese ignorante sí que era feliz, ignorante de un mundo en decadencia, ignorante de la contaminación mental y auditiva, de la hipocresía, de la triste y cruda realidad. Me dicen que es madurez y ahora entiendo porque a tantas personas les cuesta madurar. Tal vez soy un poco duro conmigo mismo, tal vez soy un poco duro con los demás o simplemente ahora veo con los ojos más abiertos. Espero que todo esto me sirva para algún día ser un buen actor y en cuanto al baile; le daré unos meses más... ya qué es parte de mi terapia, cuando bailo se me olvida todo lo que pasa por mi mente y eso es algo que se debe agradecer, si pudiera bailar todos los días a todas horas lo haría, pero también sé que hay otras cosas que hacer y muchas. En un mes más cumplo 23 años. Y siento qué la vida se me va... a ver qué pasa.